EFICIENCIA ENERGÉTICA

La gestión energética es otro de los aspectos donde la Domótica marca la diferencia.
Existen multitud de áreas donde la domótica puede actuar con el fin de aumentar la eficiencia del hogar y optimizar el uso de los recursos energéticos que disponemos.
En este post vamos a centrarnos en la eficiencia energética. Todo aquello que podemos implementar en nuestro sistema domótico que nos permita reducir el consumo energético, hacer un uso optimizado de ellos o monitorizar nuestra propia generación de energía, entre otros.

INSTALACIONES SOLARES

Empezaremos por la medida que mayor impacto va a tener en términos de eficiencia energética. 

La instalación de placas solares va a ser sin duda, de entre todas las medidas que podamos optar, la que mayor rendimiento nos va a dar ya que vamos a ser nosotros los que generemos y consumamos nuestra propia energía.

Existen dos tipos de placas solares en función de cual sea el recurso que queramos optimiza:

  • Paneles fotovoltaicos: estas placas se basan en el principio fotovoltaico, gracias al cual somos capaces de generar energía eléctrica en forma de corriente continua que, tras pasar por un inversor, dicha energía es apta para su uso doméstico.
  • Placas térmicas: estas placas por el contrario se basan en aprovechar el calor producido por el sol para calentar agua y almacenarla, de este modo cuando la vivienda presenta una demanda de Agua Caliente Sanitaria, el calentador o termo consumirá menos energía, ya que el agua parte de una temperatura superior a la ambiental, reduciendo de este modo el consumo del calentador o termo.

La opción de instalar placas solares una nuestra vivienda es especialmente interesante en aquellos casos donde la vivienda esta siendo proyectada y aún no ha sido construida, ya que en ese caso será mucho más sencilla su instalación y su coste será menor.

El coste de instalar placas solares depende de muchos factores, como por ejemplo la demanda energética de la vivienda, la superficie disponible para la instalación de placas solares, la ubicación geográfica de la vivienda entre otros. No obstante a modo de orientación, de media en viviendas unifamiliares el coste de instalar placas solares oscila entre los 5000€ y 10000€.

LA DOMÓTICA Y LAS INSTALACIONES SOLARES

Si a las placas solares le añadimos un sistema de domótica integrado podremos ir un paso más allá.
Por un lado, podremos monitorizar el uso energético de nuestra vivienda donde conoceremos el origen de la energía (red eléctrica, placas solares u otros) y el consumo eléctrico de nuestro hogar, el cual recomendamos sectorizar acorde con las distintas líneas de nuestro cuadro eléctrico.

Seguidamente, con la ayuda de algunos recursos externos (algunas paginas webs) podremos obtener una previsión de cuanta energía vamos a ser capaces de generar con nuestras placas solares. De este modo, por ejemplo, podremos prever si seremos capaces de cubrir la necesidad energética de la lavadora durante las próximas horas.

Finalmente si disponemos de baterías donde almacenar la energía sobrante podremos desplazar la demanda energética a nuestra conveniencia, por ejemplo:

  • Durante las 12:00 y las 15:00 horas, cuando la radiación solar se encuentra en su punto máximo, nos ocuparemos de almacenar toda la energía disponible en la batería.
  • Más tarde por la noche, cuando lleguemos a casa podremos usar parte de esa energía almacenada para encender las luces, preparar la cena o encender el equipo de climatización.
  • Por último, cuando nos vayamos a dormir y el consumo sea mínimo usaremos el restante de energía de la batería para cargar nuestro coche eléctrico y si la energía que queda en la batería no fuese suficiente usaremos energía de la red en una franja horaria valle donde el precio por Kwh es más bajo.

LA DOMÓTICA Y LA EFICIENCIA ENERGÉTICA

Por otro lado, la domótica no solo nos va permitir gestionar nuestras placas solares, sino que hay una gran cantidad de pequeñas acciones, que de forma rutinaria puede llevar a cabo y que tendrán un impacto en nuestro consumo energético. A continuación, os presentamos algunos de los casos de uso más habituales:

Nuestro sistema domótico puede controlar que no nos dejemos ninguna luz encendida en casa cuando nos vamos, y si así fuera, la propia domótica podría ser capaz de apagarla.

Otro punto interesante donde se derrocha energía es en todos los equipos electrónicos que se quedan en StandBy cuando no están siendo usados (por ejemplo, los monitores o los equipos informáticos). Gracias a nuestro sistema domótico podríamos decidir cuando estos dispositivos no tienen por que estar encendidos y podríamos cortarles por completo la alimentación.

Este punto trata de aprovechar el calor del sol a nuestro favor. Por ejemplo, en invierno haremos que la domótica suba las persianas en las horas de máxima insolación y posteriormente baje las persianas para mantener el calor dentro de casa.
Por otro lado, en verano el comportamiento será el opuesto, a las horas de máxima insolación bajaremos las persianas donde más esté incidiendo la radiación solar y evitar el sobrecalentamiento de nuestro hogar.

Programación de tareas

Cuando la tarificación de la energía se hace en franjas horarias, es interesante desplazar todas las tareas posibles a franjas valles donde la energía es más barata, esto es fácilmente conseguible con los sistemas domóticos. Algunas de las tareas susceptibles de llevarlas a cabo en franjas valle son: lavado/secado de ropa o carga de la batería del coche.

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